sábado, 28 de abril de 2012

PRIMER DEBATE ACADÉMICO SOBRE GÉNERO: "DIVERSIDAD SEXUAL Y GÉNERO". Miércoles 2 de mayo


Los ‘Debates académicos sobre género’ son conversaciones bimensuales que organiza el Núcleo de Género y Sociedad Julieta Kirkwood donde 2 ó 3 integrantes exponen sus investigaciones en curso y hay espacio para discutir y aportar. Son abiertas a todos a quienes les interese dialogar sobre género en nuestra sociedad.

Nuestro primer debate del ciclo será en torno al tema "diversidad sexual y género". 

L@s esperamos este miércoles 2 de mayo a las 18:30 hrs. en la sala de reuniones del Departamento de Sociología de la Universidad de Chile (Facultad de Ciencias Sociales, 3er piso).

Dirección: Avda. Capitán Ignacio Carrera Pinto 1045, Ñuñoa (ex Avda. Los Presidentes)

Contacto: Jennifer Lerner; jenn.c.lerner@gmail.com

miércoles, 25 de abril de 2012

Punto Género N° 3: nuevo plazo para enviar artículos



Amig@s:

Hemos ampliado en dos semanas el plazo para que nos envíen sus artículos y reseñas al tercer número de la Revista Punto Género. Estaremos recibiendo sus trabajos hasta el LUNES 14 DE MAYO DE 2012 en el correo puntogenero@facso.cl, donde también pueden enviarnos sus dudas y solicitar los términos de referencia.

Agradecemos desde ya la difusión de esta nueva fecha entre sus contactos y redes para no dejar a nadie fuera de la convocatoria.

Esperamos sus contribuciones.

Saludos,

Comité editorial RPG

martes, 24 de abril de 2012

Feria de Intercambios Feministas sábado 28 de abril


Sábado 28 de abril
de 14:00 a 21:00 hrs.
Plaza Yungay (Sto. Domingo con Libertad)
Barrio Yungay, Santiago



Estimadas Amigas FEMINISTAS


Somos un grupo de activistas que queremos hacer una Feria de Intercambios Feministas el día sábado 28 de abril en la Plaza Yungay. El objetivo de nuestra actividad es hablar, presentar y ver distintas iniciativas de mujeres en torno a denunciar la violencia, discriminación y desigualdad de géneros. 

Es por ello que hemos convocado a distintas personas y agrupaciones a ser parte de este espacio público y al aire libre, el sábado 28 de abril entre las 14 y las 21 hrs. 

La idea es que  ustedes que trabajan las temáticas por los derechos de las mujeres pudieran hablar de su trabajo instalándose en un stand  autogestionado en donde puedan exponer sus motivaciones y trabajos realizados. 

Entre las 15 y las 20 hrs. se realizarán paralelamente  mesas temáticas de:
  • Historia y Feminismo,
  • Diversidad Sexual y Feminismo
  • Placer y Feminismo, y 
  • Arte y  Feminismo
Esperando vuestra solidaridad y participación,


Coordinadora ENCUENTRO DE INTERCAMBIOS FEMINISTAS 2012


coordinacionfeminista@gmail.com
facebook: Coordinación Feministas
79867265

El Coronel y las "señoritas" del Carmela




"...A nosotros nos queda la instancia de apelación en la Suprema, y ese camino judicial lo vamos a ejercer y vamos a seguir tratando de ir al fondo del problema..." (Cristián Labbé, Diario La Tercera).

"...Es un problema que tienen que preguntarles a ellas por haberse metido en estas conductas. ¿Por qué no se matriculan en otro colegio?..." (Cristián Labbé, Cooperativa).


Con estas afirmaciones, el alcalde de Providencia, Cristián Labbé, militante de la UDI y militar en retiro, apoyó la decisión que la directora del Liceo Carmela Carvajal "de Prat" tomó de no reintegrar a nueve alumnas a las que se les había cancelado la matrícula por participar y conducir el movimiento secundario por la educación pública, gratuita, de calidad y no sexista en Chile, tal como la sentencia de la Corte de Apelaciones ordenó.

Mientras incrédulas mirábamos el devenir de esta situación, nos pusimos a pensar: ¿cuál es el fondo del problema? ¿Qué hace que la directora de un establecimiento educacional, identificado por la comunidad nacional como parte de los liceos de excelencia, tome la decisión de no reintegrar a estas alumnas? ¿Qué mueve a la máxima autoridad de un gobierno local a apoyar una decisión tan descabellada como negar el derecho a las jóvenes de matricularse en su liceo?

El sólo argumento de su participación en las movilizaciones del año recién pasado y la toma del liceo por más de 6 meses tampoco nos bastaron para poder entender, ya que los jóvenes del Liceo Lastarria, que recurrieron a Tribunales por el mismo caso, fueron re-incorporados sin problemas de otro tipo una vez dictada sentencia a su favor.

Entonces, ¿que sucedió con las chicas del Carmela? ¿Será que la sanción a ellas es mayor por el hecho de ser mujeres? Y no cualquier tipo de mujeres, sino de aquellas que desobedecieron el mandato patriarcal, subvirtiendo el orden de roles que tradicionalmente se les ha asignado, dejaron de ser las "señoritas calladas y sencillas" a las que apunta la educación chilena y quiere perpetuar la derecha política.

Estamos hablando de mujeres públicas, en esencia políticas y con un liderazgo legitimado por su comunidad escolar. No es sólo su habilidad de conducción y oratoria lo que las hace peligrosas, es su capacidad de provocar y seducir a sus seguidores por la consistencia del proyecto transformador que interpretan, lideran y movilizan las ideas que están en las cabezas de las "damitas" del Carmela.

El patriarcado, como todo sistema de dominación, tiene sus dispositivos de poder y de control, tiene artimañas que buscan rectificar los comportamientos que atentan contra el sistema y el orden establecido por éste, situación de la que las mujeres que estamos en lo público hemos sido víctimas en más de una vez. En este caso es la negación del derecho a matricula, como abuso del poder que tiene la dirección de un colegio y un alcalde para desobedecer a un Tribunal de Justicia y a una ciudadanía que mayoritariamente demanda reintegrar a las alumnas.

Junto con ello, han salido a la luz pública distintos procedimientos de persecución e interrogatorios que buscan generar la delación, por parte de la comunidad escolar, del Carmela Carvajal "de Prat" respecto de otras "señoritas" que están teniendo un comportamiento no adecuado. Se trata de prácticas que no son nuevas en este establecimiento ni en otros de mujeres de la comuna de Providencia, que siguen siendo parte de los enclaves autoritarios y patriarcales que no han podido ser modificados a pesar del cambio de dirección del Liceo, a pesar de vivir en "democracia", a pesar de la irrupción de lo social en la demanda por una democratización social, política y cultural en Chile.

Evidenciado el problema de fondo al que alude el alcalde Labbé, el que las alumnas del "Carmela" no se comportaron como "señoritas" y actuaron fuera del orden establecido, tenemos una lamentable noticia para él y la directora del Liceo: este proceso de transformación no tiene vuelta atrás. Cualquier dispositivo de rectificación que usen será infértil sobre una semilla ya germinada y tan orgánica que no produce efectos indeseados por quienes tienen hambre de justicia, democracia y emancipación. Las jóvenes del Liceo Carmela Carvajal "de Prat" son herederas de la ruptura de toda una generación con el miedo, con las determinaciones culturales, sociales, políticas y económicas de la democracia en la medida de lo posible. Son continuadoras de la lucha que miles de mujeres han dado en este país por romper los esquemas a los cuales han sido obligadas a ajustarse.

Y, ojo, ellas no están solas, están organizadas y saben que la unión hace la fuerza y que el "poderío" que el alcalde Labbé y la directora del Liceo detentan es falso y temporal. Es cosa de tiempo Coronel, es cosa de tiempo.




por Natalia Flores y Tatiana Hernández
Observatorio Género y Equidad

miércoles, 4 de abril de 2012

Los aplausos que venían desde lejos


Los aplausos que venían desde lejos anunciaban su llegada. El calor de la ciudad se empecinó. Corrieron periodistas buscando la primicia, con cámaras incómodas, llenando de cables el suelo pisoteado por la masa que repletamos el lugar. Un improvisado escenario albergó palabras políticas de líderes de movimientos; algunos cantos que decían quién dijo que todo está perdido, yo vengo a ofrecer mi corazón; y a una familia que jamás imaginó ese momento, pidiendo respeto y no politizar la despedida de su Daniel Zamudio Vera.

En el Cementerio General fuimos miles los/as que asistimos al entierro de Daniel, quien agonizó casi un mes tras la tortura que sufrió por una pandilla neonazi. Daniel era hombre, joven, pobre y homosexual. Vivía en San Bernardo, en un pasaje donde apenas pasa el carro de bomberos, donde se pierde la ciudad. En ese pasaje le velaron los y las vecinas, amononaron el lugar sacando sillas de sus casas, poniendo flores, preparando jugo para las visitas.

A medida que ingresaba el auto con el ataúd de Daniel, todo se subyugó al ensordecedor “Daniel, amigo, el pueblo está contigo”. Vieja consigna de la nunca acabada injusticia. Las banderas estaban agónicas por la falta de aire, pero coloreaban el cemento del camposanto.

En Chile hay tortura.

Mujeres son torturadas y asesinadas por razones de género. Se llama femicidio. Al menos en un quinto de los femicidios las mujeres fueron masacradas, desfiguradas, con alevosía, con dolo, con odio. Con moral, la que encarrila, la que designa con sangre la verdad y limpieza.

El asesinato de Daniel es el de un homosexual pobre, la de un gay de pasajes. No debe pasar desapercibido: homosexual + pobre. Y los pobres tienen la justicia del pueblo: de la marcha mientras arriba quema el sol, la del Daniel amigo el pueblo está contigo, la del show televisivo en los matinales; la de decenas de años siendo marginados, expulsados, explotados. Daniel fue enterrado en un nicho al fondo del Cementerio, cuando ya no hay más donde caminar, donde se capea el sol con malla kiwi, tan alejado de los mausoleos de presidentes, de notables, de burgueses.

Marchamos heteros, lesbianas, homosexuales, dirigentes de derechos humanos, académicos/as, vecinos/as, jóvenes, adultos, locas, queer, putos, putas, heladeros, gente fashion y gente cuma, los in y los out. Fue una marcha silenciosa y acalorada, tan larga como los cientos de danieles zamudios que han existido. Los tacos de las locas se llenaron de polvo, igual que los zapatos Zara del que andaba más enflautado. Personas en bicicleta, abuelos/as del brazo, adolescentes de pelo en la cara, periodistas sin descanso.

En Chile desde todos lados “lamentaron el hecho”, como dice la prensa. En verdad, me alegré de no ver curas, ni monjas, ni gente de la política institucional. Despedí, sin conocerlo, a una persona que, sin buscarlo, remecerá necesariamente nuestros límites como sociedad. Al parecer es consenso que no hay espacio para torturar un cuerpo, sin apellidos (pienso en: gay, comunista, delincuente, pobre). Las actuales generaciones que convivimos en Chile tenemos experiencias diversas sobre la tortura y violencia sobre los cuerpos y, tras décadas de historias, ya no parece algo normal ni aceptable. Se denuncia, se repulsa. El Estado chileno queda en vergüenza frente al mundo, pero principalmente frente a su pueblo.

Sin embargo, la lucha en Chile es ardua. Luchamos desde quienes se apropian de todo, hasta quienes no tenemos más poder que un twitter y la esperanza del Kino una vez a la semana. Pregúntenle a las nanas, a mapuches, a presos/as, a papás sin derecho a visita. O pueden leer a Teresa Marinovic.

No me digan que el aborto o interrupción del embarazo es algo valórico; no lo es más que la reforma tributaria o de educación. Es como decir es humano: todo lo es en sociedad.

No me digan que legislar sobre la discriminación es un avance: es una vergüenza. Es la premodernidad, es el medioevo con Redcompra.

No me hablen de democracia si el debate es sobre la idea de debatir el aborto o interrupción del embarazo, para que luego el Padre Presidente diga que, sin importar lo que se resuelva, vetará la discusión.

No me digan que hablar de femicidio, de aborto, de embarazos, de posnatal, es un tema de mujeres. Menos que es valórico. Decir lo último es caer en la trampa católica de la Santísima Concepción: todo lo que sea del ombligo para abajo es valórico.

Lo ocurrido con Daniel Zamudio no debiera entenderse como algo aislado ni como un acto exclusivo contra los/as homosexuales desde un exaltado grupo radical conservador. Lo sucedido es la tortura y asesinato de un miembro de la sociedad que no cumplió mandatos de género y de clase coherentes. Esto ocurre todos los días. Lo de Daniel es el absurdo de lo cotidiano, la vulgarización de una práctica camuflada en nuestras palabras, bromas, publicidad, incluso en campañas gubernamentales sosteniendo que maricones son los que golpean a determinados grupos.

Cuando ya nos íbamos del Cementerio, recorriendo los pasos hacia Av. Recoleta, comiendo un helado de $200, una señora de edad algo cansada pero satisfecha, me dijo que el asesinato de Daniel es responsabilidad de todos/as. Lo primero que pensé: fuerte es la asimilación del lenguaje periodístico. Pero luego de unos minutos, comprendí lo básico que la sociología enseña en sus primeras lecciones: el sentido común, esa voz en almacenes y paseos por la calle, dice las verdades silenciosas que cimentan nuestras relaciones, resumidas en palabras que escuchamos en todos lados, en cada muro, en muchas canciones. Y la señora me recordó que la comunidad ha fallado, que la polis no existe, que no sabemos de diversidad, que nos tiene aniquilados/as el sentido de la propiedad.

No hay palabra más silenciosa que la del sentido común, y no hay otro lugar en donde escuchar más fuerte el estruendo de la vida social.

El asesinato de Daniel marcó un precedente en la lucha por los derechos básicos en democracia que afectan las relaciones interpersonales (matrimonio homosexual, interrupción del embarazo, no discriminación) y que han sido bandera de muchas batallas en Chile, de diversos grupos.

Vendrán los discursos, mejor que vengan libertades. Vendrán los gestos, mejor que vengan las acciones. Vendrán las promesas, mejor que vengan resoluciones. Vendrán más torturas y discriminaciones, y ahí mejor que sea el sentido común quien aplaste esa violencia; entonces, la ley o reforma que sea, será solo un dato de la causa. Nuestra mejor arma es que sea anormal lo sucedido con Daniel, siendo él un símbolo de discriminados/as, abusados/as y explotados/as. Nunca un mártir.

Juan Manuel Cabrera U.
Núcleo de Investigación en Género y Sociedad Julieta Kirkwood

lunes, 2 de abril de 2012

Revista CERES... Creando feminismo


Ya puedes revisar la primera edición de la Revista "Ceres, creando feminismo" publicación realizada por la Marcha Mundial de las Mujeres- Chile. En nuestro primer número publicamos una serie de artículos sobre la contingencia nacional, reflexiones sobre el feminismo y temas de interés, así como reseñas de algunas publicaciones.

Para verla en pdf pincha AQUÍ y si quieres tu ejemplar de Revista Ceres impresa puedes escribirnos a marchamujereschile@gmail.com